Meditación guiada:
Perdonar a Uno es Perdonar a Todos: Meditación para la Unidad
Nuestra mente está llena de pensamientos y creencias del ego que nos mantienen atrapados en la ilusión de la separación. Sin embargo, la paz y la felicidad verdadera se encuentran en reconocer nuestra unidad como hijos de Dios.
Esta meditación guiada te ayudará a soltar los juicios y las creencias del ego, para que puedas conectar con la luz de tu Ser Verdadero.
En tu vida diaria, puede ser de gran utilidad cuando te encuentres frustrado o frustrada, con una persona en particular. En lugar de reaccionar con juicios y conflicto, puedes detenerte y usar esta práctica para recordar nuestra unidad.
Esto te ayudará a ver más allá de las diferencias aparentes y conectar con la luz que brilla en nosotros y en los demás. Cuando eliges la paz en lugar del ego, tus relaciones y experiencias se transforman.
Afirmación para recordar:
“Veo a todos como a mí mismo. Somos uno en Cristo.“
Siente cómo tu cuerpo se relaja y tu mente se aquieta.
Ahora, trae a tu mente a una persona con la que hayas tenido dificultades o conflictos.
Visualiza su rostro con compasión, sin juzgar.
Recuerda que ésta persona, al igual que tú, es un hijo amado de Dios.
Ambos comparten la misma esencia divina, aunque sus acciones puedan haber sido diferentes.
Repite mentalmente: “Yo te perdono. Reconozco que tu interés es el mismo que el mío, pues somos uno en Cristo”.
Siente cómo el perdón y la comprensión llenan tu corazón.
Observa cómo ésta sensación de unidad se expande, abarcando a todas las personas que conoces y a la humanidad entera.
Todos somos hermanos y hermanas, hijos del mismo Padre.
Permanece en silencio por unos momentos, permitiendo que ésta nueva percepción se asiente en tu mente.
Siente cómo la tensión y el juicio se disuelven, reemplazados por una sensación de paz y amor.
Cuando hayas concluido, abre lentamente tus ojos.
Ahora, lleva ésta nueva comprensión de la unidad contigo, durante el resto de tu día.
Utiliza esta afirmación a lo largo del día:
“Veo a todos como a mí mismo, Somos uno en Cristo.“